En el negocio de los créditos hipotecarios, comúnmente nos encontramos con dudas que están relacionadas a las políticas de antaño de las instituciones financieras; este rubro ha sido muy dinámico en los últimos años y ha evolucionado de manera significativa a favor del cliente, de tal manera que hay tramites que en estos días se pueden hacer sin más problema y que antes eran imposibles o caros. Es usual que se piense en “traspasar” una casa cuando aún se debe, en vez de pensar en venderla.
Situaciones comunes
Lo que llamamos comúnmente “traspaso,” no es otra cosa que ceder los derechos de la propiedad a un tercero quedando el crédito a nombre del vendedor; de tal manera que, si el comprador se atrasa, el afectado no es él, sino el vendedor. En estos días, es completamente normal vender una propiedad que aún se debe, y que el comprador le pague al banco dueño de la antigua hipoteca, y le dé la diferencia al vendedor; ya sea con una nueva hipoteca o de contado. También es común que se tramite un crédito hipotecario para adquirir una vivienda nueva o usada, ya que no hay diferencia; cualquier crédito hipotecario puede ser usado de manera indistinta.
Por otro lado, hay gente que desea construir su propia casa, a su gusto y conveniencia, ya sea en un terreno propio o adquiriendo uno. Existen en el mercado créditos disponibles para construir sobre un terreno propio, adquirir un terreno y construir, o sólo comprar el terreno.
Otro tipo de crédito es el de “Liquidez”, ya que hay gente que ocupa una fuerte cantidad de dinero y cuentan con alguna propiedad que valga un poco más que el dinero que necesitan. En este caso, el dinero resultante, como ya lo comenté, el cliente lo podrá usar de acuerdo a sus intereses.
En conclusión, hay disponibles una gran gama de opciones. Es importante, así como acudir al médico, acudir a un experto que nos “recete” la hipoteca que va de acuerdo a nuestra necesidad.
FUENTE Gonzalo Dórame (662) 260-1343