Exposición Arte Funerario Teresa Loza M
El pasado jueves 16 de agosto a las 20:00 horas, en la concurrida inauguración de la exposición Arte Funerario, de la pintora Teresa Loza Macedo, Enrique Rodríguez, quien fuera su maestro en la licenciatura de Artes de la Unison, dedicó unas palabras que hicieron que los asistentes perdiéramos cualquier posible resquemor alrededor del título de la obra: en la religión católica, después de ser el hombre expulsado del paraíso, éste quedó en custodia de un ángel con una espada flamígera.
De acuerdo a lo anterior, y hasta hace aún algunas décadas, era tradición que a nuestros difuntos los acompañaran en el sepulcro figuras de ángeles o querubines, por ser ellos los únicos que podían conducirlos al cielo y asegurarles la entrada, intercediendo ante aquel otro ángel, el custodio.
Ante la ya casi desaparecida práctica de enterrar a los difuntos, ha ido desapareciendo también la tradición escultórica de la que se acompañaba, que a pesar de ser producto de un oficio, muchas veces, apunta el maestro Rodríguez, era incluso más exquisito que el arte que se encuentra en los museos. De estas esculturas ya “descontinuadas”, son aún menos las que contamos por el robo de las que son objeto en los panteones. Teresa Loza, sensible a la belleza de estos guardianes silenciosos, los transfiguró en su lienzo, y con paleta de vivo tono, para ponerlos a salvo del olvido.