La arquitectura cultural también es un obra de arte per se.
Estos cuatro edificios culturales son obras de arquitectos de renombre y se encuentran en diferentes partes del mundo. Además de albergar arte y cultura y transmitirla a todo público, por su gran impacto se convierten en monumentales obras de arte.
Centro Cultural Jean Marie Tjibaou /Nouméa, Nueva Caledonia
Renzo Piano
Construido en 1991-98, el arquitecto Renzo Piano, aunó las culturas del Pacífico y la modernidad. Es un centro destinado a la promoción de la cultura canaca; se buscó hacerle un homenaje a su historia y tradiciones, a su pasado, presente y futuro. Se compone de diez “cabañas”, todas de diferente tamaño y función, construidas dentro de una reserva natural y basadas en los poblados indígenas de esa parte del Pacífico, su cultura y sus símbolos.
Museo de la Biodiversidad /Panamá
Frank Gehry
El Biomuseo es la primera obra de Gehry en Latinoamérica. Fue diseñado para contar la historia de cómo el istmo de Panamá surgió del mar, uniendo dos continentes, separando un gran océano en dos y cambiando la biodiversidad del planeta para siempre. el museo de 4000 m2, contiene ocho galerías de exhibición permanente y una para temporales, un atrio público, una tienda, una cafetería y múltiples exhibiciones exteriores en un parque botánico.
Centro Roberto Garza Sada /México)
Tadao Ando
El CRGS, dentro de la Universidad de Monterrey, es el espacio de ideas y expresiones que desarrolla el mejor talento creativo. Se convertirá en la mejor escuela de arte, arquitectura y diseño en Latinoamérica. Cuenta con Certificación Leed, siendo así la primera de las obras de Tadao Ando con este reconocimiento. es un espacio de bienvenida, un hito arquitectónico, un acceso y un ámbito de docencia e invención: un umbral hacia la creación.
Museo de Louvre /Abu Dhabi
Jean Nouvel
El proyecto está basado en uno de los principales símbolos de la arquitectura árabe: la cúpula. Pero aquí la cúpula está duplicada y plana, ofreciendo una geometría luminosa y perforada aleatoriamente en un material tejido que crea una sombra punteada con ráfagas de sol. Así, el Louvre de Abu Dhabi es un remanso de luz durante el día y por la tarde un santuario para las obras de arte más valiosas.