Las crudités son una gama de botanas frescas, tradicionales de la gastronomía francesa, compuestos de verduras crudas. Se pueden tomar también como aperitivo o como guarniciones. En Francia, la forma más clásica es la de una ensalada variada presentada decorativamente en una fuente plana. Las crudités se elaboran con vegetales o frutas crudas como el tomate, aderezados con una vinagreta o cualquier otro tipo de aderezo. Según la presentación escogida, se admiten toda clase de cortes: en rodajas, en juliana, en bastoncitos o enteros, si la verdura es de tamaño pequeño. Las crudités se componen de verduras que se pueden consumir crudas como las zanahorias, el apio en ramas, los tomates, el pepino, los rábanos, los champiñones, las distintas clases de lechuga, y algunas hortalizas cocidas como los espárragos y betabel. Puede llevar un huevo duro acompañado de mayonesa, atún en conserva o queso.
