Todas deseamos una casa bonita, limpia, ordenada, pero sobre todo en buenas condiciones. Para lograrlo es necesario darle un mantenimiento constante, que representa un alto costo, pues un desperfecto que no se arregla se convierte en un problema de mucho dinero.
Taladrar, pintar y resanar no son sólo tareas para hombres, también tú puedes hacerlas.
La pregunta es: ¿por qué no solucionar esos desperfectos tú misma? Nos han dicho que taladrar, pintar, resanar, barnizar y hasta reparar el techo o la casa del perro son cosas de hombres, pero no es así. Tú puedes hacer eso y más, es cuestión de atreverte y, lo más importante, tendrás un ahorro económico significativo.
Tú eres capaz de manejar perfectamente el martillo, el taladro, la brocha, la espátula, el desarmador y demás herramientas. Aprende a usarlas sin miedo y aplícate para lograr lo que quieres. Una vez que lo hagas y veas el trabajo realizado, sentirás una gran satisfacción y amarás aún más tu casa porque, al conservarla en buenas condiciones, también estarás cuidando tu patrimonio y el de tu familia Todo esto puedes hacer para el mantenimiento de tu casa gastando poco y enorgulleciéndote al máximo.
Aquí te damos unos tips que te servirán mucho para comenzar:
1. Para aflojar tornillos apretados por el óxido, ponles refresco de cola; pero si están pegados al metal, viérteles un poco de agua oxigenada.
2. Para insertar fácilmente un tornillo, unta la rosca con jabón. y si el desarmador o destornillador se resbala, ponle gis en la punta.
3. Si vas a cortar madera, evita que se astille cubriendo con cinta adhesiva la línea por donde pasarás el serrucho.
4. El truco de la cinta lo puedes aplicar también en muros o plafones de yeso si vas a clavar algo, así evitarás desprendimientos de material.
5. Para taladrar piezas de azulejo, perfora con un clavo y martillo el punto donde harás el orificio. Golpea suavemente sólo para eliminar la capa lisa. Con cinta adhesiva cubre el resto de la pieza para evitar que la vibración la dañe. Ahora sí, apoya la punta de la broca del taladro en el punto marcado y perfora.
6. Cuando guardes las herramientas, pon en su caja un pedazo de carbón, gis o bolitas de naftalina; esto evitará que la humedad las oxide. todo listo, ¡manos a la obra!
TEXTOS CORTESÍA DE Revista sensaciones de Comex.